"En la última jornada los aviones de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia efectuaron 16 vuelos de combate sobre 57 infraestructuras terroristas", afirmó.
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Konashénkov destacó que "debido a las condiciones meteorológicas desfavorables y para prevenir el riesgo para los civiles la aviación rusa realizó las tareas militares solo en la provincia de Latakia y Deir Ezzor".
Indicó que los aviones rusos destruyeron en Deir Ezzor un campamento de Daesh, lanzacohetes múltiples, armas de artillería y un almacén de combustibles.
En Latakia, según el militar, "la aviación rusa lanzó cuatro golpes contra grupos separados de los radicales que se retiraban presionados por las tropas gubernamentales de Siria y la oposición patriótica".
Además, agregó que un avión Su-34 logró destruir un taller en las afueras de la localidad siria de Hatla, donde los terroristas fabricaban coches bomba.
La operación aérea rusa en Siria comenzó el pasado 30 de septiembre, atendiendo a una petición del presidente, Bashar Asad.
La aviación rusa ataca las posiciones de grupos como Daesh (autodenominado Estado Islámico) o el Frente al Nusra, organizaciones terroristas proscritas en Rusia y otros países.
Desde marzo de 2011 Siria está inmersa en un conflicto armado que ha costado la vida a más de 250.000 personas, según estimaciones de la ONU.
