Los dos dirigentes mantuvieron este martes una conversación telefónica al respecto.
El político recordó que Irak rechaza desde hace ya más de un año la participación de fuerzas extranjeras en la lucha contra los terroristas, aunque hubo propuestas al respecto por parte de otros países de la región.
"Ni un soldado extranjero combate en Irak, hay solo asesores e instructores, las victorias fueron logradas solo por los iraquíes", recalca el primer ministro.
Por su parte, el jefe de la autonomía kurda apoyó la línea del Gobierno en este aspecto y se pronunció por colaborar contra Daesh (autodenominado Estado Islámico) con otros países "bajo las condiciones de coordinación y el respeto de la soberanía" de Irak.
Bagdad calificó de invasión la llegada de los soldados turcos y exigió su retirada inmediata.
El jefe del Comité de Seguridad y Defensa del Parlamento de Irak, Hakim al Zamili, declaró que Irak podría atacar a los militares turcos si no abandonan el país.
Sin embargo, el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, aseguró que se trata de una rutinaria rotación de tropas y prometió que Turquía no enviaría más fuerzas hasta que se estabilice la situación diplomática.