El Gobierno libio ha pedido a sus aliados de entre las naciones árabes bombardear las posiciones de los terroristas.
"Tras las consultas se ha decidido realizar esa reunión (del Consejo de la Liga Árabe) el martes, en la que se planea examinar el levantamiento del embargo de armas al Gobierno libio y la ayuda económica en la lucha contra el terrorismo", subrayó al fuente.
Según sus palabras, el organismo también estudiará pedir al Consejo de Seguridad de la ONU que se pronuncie sobre la situación libia.
La expansión del EI, que en tres años logró apoderarse de vastos territorios en Irak y Siria y pretende extender su influencia a países de África del Norte, es actualmente una de las amenazas más graves para la seguridad mundial.
Desde la intervención militar de la OTAN que resultó en el derrocamiento y muerte de Muamar Gaddafi en 2011, Libia ha estado sumida en la violencia y la inestabilidad política.
Actualmente, este país cuenta con una dualidad de poderes representado de un lado por el Parlamento con sede en Tobruk, que fue elegido en los comicios generales, y se encabeza por Abdullah al-Tani, y de otro lado por El Congreso General de la Nación proislamista con el primer ministro, Omar al-Hasi.
Distintas facciones, grupos tribales y políticos han librado una cruenta lucha por hacerse con el control del país.
