Según el comunicado del Ministerio de Defensa, 86 combatientes fueron asesinados y 37 resultaron heridos durante una serie de operaciones llevadas a cabo en las provincias de Ghor, Helmand, Logar, Nimruz y Zabul.
De la parte de los uniformados afganos fallecieron dos personas.
Durante la operación, las tropas gubernamentales confiscaron armas ligeras y pesadas y desactivaron veinte dispositivos explosivos improvisados.
Afganistán se enfrenta al desafío de la falta de la seguridad después de que Estados Unidos y sus aliados invadieran el país en el marco de la llamada guerra contra el terrorismo lanzada en 2001.
La ofensiva derrocó a los talibanes del poder, sin embargo muchas áreas del país hasta ahora experimentan constantes incidentes de violencia que amenazan a la seguridad de la población.
A pesar de que la misión militar dirigida por EEUU finalizó el 31 de diciembre de 2014, en el país permanecen al menos 13.000 militares extranjeros, la mayoría de ellos estadounidenses, denominados por Washington como misión de apoyo.
Según la OTAN, las actividades de las fuerzas extranjeras en general ce centran en la lucha contra el terrorismo y el entrenamiento de los soldados y policías afganos.
Afghan forces kill 86 Taliban militants in cleanup operations http://t.co/seBuHmKltx pic.twitter.com/3LJZUExcaw
— Press TV (@PressTV) 14 мая 2015
