La Guardia Revolucionaria de Irán confirmó la muerte del general Mohammad Allahdadi, que estaba sirviendo en Irán como asesor del Ejército sirio.
Las informaciones de medios locales anoche indicaban que Israel había matado en un bombardeo con helicópteros a miembros de Hizbulá, entre ellos Yihad Mughniyeh, hijo del difunto líder militar de este grupo Imad Mughniyeh, asesinado en Damasco en 2008.
Aunque se desconoce exactamente quien estuvo detrás de su muerte, la versión que se apunta es que lo mataron los servicios de espionaje israelíes, que colocaron una bomba en su coche.
El bombardeo israelí se produjo en el área de Masra al Amal, en las afueras de Quneitra, localidad situada en la frontera con los Altos del Golán ocupados por Israel desde 1967, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El Ejército israelí no ha confirmado ni negado las informaciones. El gabinete de seguridad del gobierno israelí tiene previsto reunirse mañana para estudiar la posibilidad de que la situación se complique en su frontera con el Líbano y Siria, en el norte de Israel.
Algunas unidades del Ejército israelí con sede en el norte han ordenado a sus soldados que se queden y no tomen días de permiso.
Fuentes de servicios de inteligencia occidentales indicaron ayer que una unidad encabezada por Yihad Mughniyeh estaba preparando ataques contra Israel con cohetes, misiles antitanque y bombas, y planeaba "enviar terroristas" a territorio israelí.
El ataque israelí se produjo tres días después de que el líder de Hizbulá, Hasan Nasrala, dijera que consideraba los ataques israelíes en Siria como actos de agresión y que este país y sus aliados tenían derecho de responder.
