Moscú, 16 de agosto. RIA Novosti. El presidente de EEUU, Barack Obama, se bañó en las aguas del Golfo de México para promover el turismo en esa zona donde se produjo la mayor catástrofe ecológica, informó la prensa local.
Después de sus vacaciones de una semana con su familia en el balneario de Marbella (España), el mandatario estadounidense decidió bañarse en las aguas del Golfo de México, afectadas por el vertido de crudo tras el colapso de la plataforma Deepwater, para demostrar que son inocuas.
Según la compañía Oxford Economics, las pérdidas que experimentarían las ciudades costeras en el supuesto de que los turistas desistan de visitarlas por un periodo de tres años debido a las consecuencias del derrame de petróleo en el Golfo de México, ascenderían a 23 mil millones de dólares.
"Después de una escrupulosa limpieza todas las playas en las costas del Golfo de México están absolutamente limpias y las aguas aptas para bañarse. Están a la espera de turistas. Es por esta razón que llegué aquí con mi familia", declaró el mandatario estadounidense a la prensa internacional.
La plataforma Deepwater Horizon se hundió cerca de la costa de Luisiana el pasado 22 de abril, tras una explosión y subsiguiente incendio que costaron la vida a 11 personas.
Como resultado se derramaron en el Golfo de México casi cinco millones de barriles de crudo, lo que convierte a este accidente en la mayor catástrofe ecológica en la historia de los EEUU.
Peligros de la contaminación de petróleo para la fauna marina. Infografía 
Campana submarina para sellar el pozo petrolífero averiado en el Golfo de México. Infografía
