Moscú, 3 de agosto, RIA Novosti. Las pérdidas de Rusia por congelar la cooperación técnico-militar con Irán pueden alcanzar entre los 11.000 a 13.000 millones de dólares, informó hoy a RIA Novosti Ígor Korotchenko, director del Centro de Análisis del Comercio Mundial de Armas (CACMA).
"Esta cantidad comprende tanto los contratos adquiridos, como el lucro cesante por incumplir compromisos a largo plazo", explicó el experto.
Según el CACMA, en 2001 Teherán inició la ejecución de un plan de rearme de sus Fuerzas Armadas que preveía adquirir sobre todo armas y material de guerra de fabricación rusa en los siguientes 25 años. El presupuesto total del plan se estima en 25.000 millones de dólares.
"Entre 2010 y 2025, la industria armamentística rusa podría ingresar al menos la mitad de esa cantidad", señaló Korotchenko.
Según el jefe del CACMA, uno de los sectores más prometedores de la cooperación técnico-militar con Irán es el de la defensa antiaérea.
Misiles antiaéreos S-300P. Infografía >>
A finales de 2007, ambos países pactaron el suministro a Teherán de cinco grupos de misiles S-300PMU-1 por un total de unos 800 millones de dólares. En caso de anular el contrato, Moscú podría enfrentarse a una multa equivalente al 10% de su valor, con lo que las pérdidas rusas sólo por congelar la entrega de los S-300 ascendería a 900 millones de dólares.
Además, en un futuro Irán podría comprar también entre 18 y 36 sistemas de misiles antiaéreos de medio alcance Buk-M2E. En este apartado, el lucro cesante de Rusia se estima entre 250 y 500 millones de dólares.
Anteriormente, Rusia vendió a Irán 29 sistemas antiaéreos Tor-M1 valorados en 700 millones de dólares y que actualmente están desplegados para proteger objetivos oficiales y militares más importantes de Irán. De no vender piezas y misiles para estos sistemas, Rusia dejaría de ingresar entre 50 y 80 millones de dólares.
Asimismo, los iraníes se han interesado por los misiles portátiles Igla y las estaciones de radares Gamma-DE y Kasta-2E2, apartado donde Rusia podría perder hasta 700 millones de dólares.
De esta forma, sólo en el sector de los misiles antiaéreos las pérdidas de Rusia se situarían entre 1.800 y 2.200 millones de dólares.
