Moscú, 2 de agosto, RIA Novosti. Anapka, la burra rusa que se hizo famosa a mediados de julio pasado tras un paseo en paracaídas sobre una playa del mar de Azov, podrá olvidarse de aquella pesadilla gracias al tratamiento de lujo que la espera en las caballerizas del Kremlin, informó hoy el tabloide británico The Sun, nuevo propietario legal de este animal.
Antes de viajar a Gran Bretaña, su nueva patria, Anapka pasará por una especie de cuarentena en la prestigiosa Escuela de Equitación del Kremlin, en las afueras de Moscú. Además de someterse a pruebas médicas, la burra recibirá allí un tratamiento propio de un hotel de cinco estrellas. Tendrá un compartimento confortable de 4,6 por 4,6 metros, con aire acondicionado, agua filtrada, sesiones de solario, masaje, baños calientes, más una dieta especial que incluirá zanahorias orgánicas.
"Estamos muy contentos de poder contribuir a la prosperidad de este pobre animal y dispuestos a darle a Anapka la bienvenida con todo nuestro amor y hospitalidad", declaró Boris Petrov, director de la escuela fundada hace cuatro años.
Será la primera burra atendida en estas caballerizas cuyas 70 plazas se reservan habitualmente para la aristocracia equina de Rusia. "Tendrá buenos vecinos aquí. Nuestros caballos participan en numerosos eventos de nivel estatal, incluidas las ceremonias oficiales de guardia montada en la Plaza Roja de Moscú", aseguró Petrov.
Una fuente del Kremlin comentó que en este lugar "Anapka pensará que ha muerto y se ha encontrado en un paraíso de burros".
Anapka se lanzó al estrellato el pasado 15 de julio cuando los dueños de un puesto de paravelismo la pasearon con fines publicitarios en un paracaídas sobre una playa del mar de Azov, en el sur de Rusia. Asustada, la burra rebuznaba con tanta desesperación que muchos niños se echaron a llorar. Ese escándalo del maltrato de animales trascendió a la prensa rusa e internacional pero la Policía tardó varios días en localizar a los presuntos implicados y a su víctima.
