Tel Aviv, 23 de abril, RIA Novosti. Las autoridades de Israel no se apresuran a reconocer como espía suyo al militar jubilado detenido en EEUU, pero temen que el escándalo de espionaje pueda amargar las relaciones entre los dos países.
La Corte del Condado de Nueva York acusó ayer al ex ingeniero mecánico del Ejército de Tierra de EEUU, Ben-Ami Kadish, de 84 años, de entregar entre 1979 y 1985 a Israel información clasificada sobre armamento nuclear, sistemas de defensa antiaérea y diseño de cazas.
Los servicios de prensa del Gobierno y del Ministerio del Interior de Israel afirman que se han enterado de Kadish sólo a través de los medios de información. "No sabíamos nada de esa persona hasta entonces", aseguró el portavoz de la diplomacia israelí Arie Mekel.
El portavoz del Departamento norteamericano de Estado, Tom Casey, manifestó ayer que EEUU no esperaba "tal actitud por parte de un país amigo y aliado".
El portal de noticias Why Net comenta que Kadish difícilmente pudo haber menoscabado la capacidad defensiva de EEUU porque había prestado servicio hace 25 años. Lo que más amarga a EEUU es que los patrocinadores del ex militar israelí lo habían consultado hace dos semanas sobre cómo debía comportarse durante los interrogatorios y cómo podía engañar a los jueces de instrucción.
