La Habana, 5 de diciembre, PL, para RIA Novosti. El actor español Javier Bardem llegó a Cuba como invitado del 29 Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, en el que participa por primera vez aunque se ha mantenido al tanto de su trayectoria, dijo.
Alojado en el Hotel Nacional de Cuba, cuartel general de la muestra-certamen habanera, se refugió en su habitación poco después de su llegada para reponerse de la fatiga del viaje.
Antes sostuvo un breve intercambio con la prensa, durante el cual se le vio relajado.
Dueño de un talento heredado en sus genes -es miembro de una dinastía de cineastas y actores-, Bardem se caracteriza por un amplio registro interpretativo que le permite asumir cualquier reto como el del cuadrapléjico de Mar adentro (2004).
El actor es el primero de una constelación que se dará cita en La Habana, de la cual forman parte la alemana Hanna Schygulla, la actriz fetiche del fallecido Fassbinder, y los actores Gael García Bernal y Diego Luna.
Bardem vino aquí también como productor del documental Invisibles, -que será exhibido en la sección dedicada a la filmografía española- sobre cinco conflictos o crisis relegadas por los medios de comunicación, según reportes anuales de los Médicos sin fronteras.
El filme lo conducen seis cineastas de prestigio reconocido: Manuel Barroso, Isabel Coixet, Javier Corcuera, Elena García, Fernando León de Aranoa y Wim Wenders.
Recientemente rodó con Woody Allen Vicky Cristina Barcelona y aun lleva consigo los últimos resplandores de Florentino Ariza, el amante tenaz que esperó más de 51 años para consumar su amor con la inasible Fermina Daza.
Mike Newell lo dirigió en esta versión de El amor en los tiempos del cólera, la novela del escritor colombiano Gabriel García Márquez, estrenada en Estados Unidos y esta semana en las pantallas mexicanas.
En opinión de algunos críticos, puede ser un fuerte candidato al Oscar 2008 de actuación por su papel de asesino despiadado en No country for old men, de Ethan y Joel Coen. Un asesino asediado por sus trastornos mentales.
Uno de sus proyectos futuros es encarnar al narcotraficante colombiano Pablo Escobar en Killing Pablo, y también trabajar a las órdenes de Francis Ford Coppola en Tetro.
Por lo pronto está en La Habana dispuesto a ver cine latinomericano del más reciente. En esta parte del mundo se hace buen cine, asegura.
