Tallin, 11 de julio, RIA Novosti. La Fiscalía General de Estonia ha vuelto a acusar a Rusia de negarse a cooperar en la investigación de los ciberataques lanzados en abril pasado contra el país báltico.
"Lamentablemente, Rusia interpreta a su modo las cláusulas del acuerdo interestatal sobre la asistencia legal recíproca, y ello significa que no desea colaborar", reza el comunicado que publicó la Fiscalía General de Estonia en relación con la solicitud de ayuda jurídica que había cursado tras los ciberataques registrados en abril.
Los sitios de las instituciones gubernamentales de Estonia, así como muchos otros sitios web de ese país, fueron objeto de ciberataques después que las autoridades procedieran a desmontar, a finales de abril, el monumento soviético al Soldado Libertador (también conocido como Soldado de Bronce) instalado en el centro de la capital estonia de Tallin.
Las autoridades estonias -y personalmente el primer ministro Andres Ansip-afirmaron que los ataques procedían desde los ordenadores instalados en establecimientos gubernamentales de Rusia. Moscú declaró que eran acusaciones infundadas. Dicho sea de paso, los expertos de la UE y de la OTAN no encontraron ninguna "pista rusa" en los ciberataques contra los sitios estonios.
El 10 de julio, la Embajada de Rusia en Estonia comunicó que la Fiscalía General rusa estaba dispuesta a prestar ayuda a los organismos investigadores estonios en virtud del Acuerdo de asistencia legal firmado por los dos países, pero recordó que el documento no preveía actividades de investigación.
