Moscú, 15 de diciembre, RIA Novosti. El primer ministro libanés Fuad Siniora da un paso muy arriesgado saliendo a Moscú para entrevistarse con los dirigentes rusos en un momento tan acuciante para Líbano pues, en ausencia suya, puede producirse cualquier cosa, incluido un golpe de Estado, señala el politólogo ruso Viacheslav Nikonov.
Rusia, en opinión de este experto, es el único mediador capaz de contribuir al arreglo de la situación en Líbano y el tema en cuestión tendrá importancia clave durante las negociaciones que Fuad Siniora, así como el presidente de Siria, Bashar Al-Assad, van a mantener próximamente en Moscú.
Las recientes manifestaciones antigubernamentales convocadas por la oposición libanesa inspiran la simpatía en Siria y, probablemente, cuentan con su apoyo, y puesto que Hezbolá y Damasco tienen muy escasos contactos con Occidente, Rusia se vislumbra ahora como único mediador de autoridad que puede influir en el proceso de la estabilización en Líbano, explica Nikonov.