Moscú, 24 de noviembre, RIA Novosti. Rusia condena enérgicamente la ‘monstruosa provocación e invectiva extremista que ha provocado la muerte de personas inocentes y que no puede tener justificación', subraya el portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Mijaíl Kamynin, en referencia a la cadena de explosiones que dejó el jueves un saldo de más de 150 muertos y alrededor de 300 heridos en Bagdad.
El alto diplomático ruso, al expresar las condolencias a los familiares de las víctimas y constatar que los autores intelectuales de esos atentados ‘se empeñan en desestabilizar aún más la situación para que en Irak cundan el miedo, la división y el odio', exhorta a los líderes de todas las fuerzas políticas, comunidades étnicas y religiosas de este país a manifestar un alto sentido de responsabilidad por el futuro de la nación y aunar el esfuerzo para reencauzarla hacia la paz y la seguridad.
A título extraoficial, un representante anónimo de la cancillería rusa reconoce en declaraciones a RIA Novosti que la escalada de violencia testimonia que la situación en Irak se vuelve insostenible. ‘Son las autoridades y las tropas aliadas las que responden por la seguridad en Irak' - recuerda él.
Aparte de cinco explosiones de coches bomba en el barrio chiíta de Bagdad, ayer fueron lanzadas entre 12 y 15 minas contra la zona Al-Azamiya, poblada por los sunnitas. Este bombardeo dejó un saldo de al menos 20 muertos y 5 heridos, informa la agencia de noticias kuwaití citando fuentes policiales. En la jornada del jueves también fueron descubiertos en Bagdad los cadáveres de 52 personas que habían sido torturadas antes de la ejecución.