Andrei Kisliakov, RIA Novosti. La industria aeronáutica rusa da prioridad a la fabricación de aviones anfibio.
En el momento actual Rusia se desvela como líder mundial incuestionable en el desarrollo y la producción de los hidroaviones. Se ganó fama el anfibio multipropósito Be-200, producto del grupo aeronáutico de Taganrog (TANTK). El aparato quedó homologado conforme a las normas imperantes en EE UU y en Europa por lo que se le da la luz verde para la presencia en los mercados mundiales.
En la sexta edición de la exposición de hidroaviones, celebrada hace poco en Gelendzhik, los Be-200SE -versión para situaciones de emergencia- establecieron ocho plusmarcas mundiales "sin sudar la camiseta". Uno de los aparatos que se exhibían en la muestra acababa de regresar de Portugal, donde cumplía tareas de extinción de incendios forestales a solicitud del Ministerio del Interior de este país.
El Be-200SE es capaz de transportar de hasta 44 pasajeros, pero ya en 2008 una nueva versión del aparato podría llevar a bordo 68 personas.
El mercado de ventas más promisorio es la región Asia-Pacífico, cuyos compradores potenciales podrían adquirir unos 400 aviones Be-200 a un precio regalado de 20 millones de dólares por unidad. El canadiense CL-415, obra de la compañía Bombardier, cede ante el aparato ruso en cuanto a los performances y el rendimiento en servicio.
La producción en serie del Be-200 le tocó al grupo aeronáutico de Irkutsk, pero este fabricante de aviones cumple mayoritariamente los contratos de suministro de los cazas Su.
Obtuvo el certificado de aeronavegabilidad el avión ligero multipropósito Be-103 que destaca por su original configuración aerohidrodinámica. Es un monoplano de ala baja lo que le proporciona estabilidad durante la ejecución de las operaciones de despegue y aterrizaje desde el espacio acuático. El aparato, patentado por TANTK, puede tanto transportar pasajeros como cumplir misión de ambulancia y utilizarse para los fines de monitoreo ecológico y en la agricultura. Produce el aparato la fábrica de construcción de aviones de Komsomolsk del Amur.
Los anfibios no dejan de despertar el interés entre los transportistas aéreos extranjeros lo que confirma su presencia en diversas exposiciones internacionales. Ya quedaron suscritos los contratos de suministro del Be-103 a Brasil y Chipre.
En lo que respecta al mercado doméstico, es preciso dotar de un adecuado sistema de transporte a Siberia, Yakutia y Lejano Oriente, regiones ricas en recursos naturales. En el momento actual el componente aéreo en el mencionado sistema es relativamente bajo por prevalecer en el mismo los helicópteros. Las compañías extractoras no quieren efectuar fuertes inversiones en el desarrollo de la infraestructura de transporte, mientras requiere de gastos mínimos el acondicionamiento de las áreas de estacionamiento de helicópteros.
Cabe señalar que resulta mucho más barato crear y mantener las bases de hidros que desarrollar la red regional y local de aeropuertos y aeródromos. Es mínima la influencia de los hidroaeródromos en el medio ambiente. Los anfibios -por ser aparatos de amplias prestaciones- pueden prestar servicios a los clientes como geólogos, cazadores, etc.
TANTK puso en marcha los proyectos de desarrollo del nuevo anfibio Be-112 de 12 plazas y del hidroavión ligero Be-101 de 4 plazas. El Be-112 con masa de despegue de hasta 12 toneladas será provisto de un fuselaje amplio y rampa de carga desplegable por lo que ganaría en flexibilidad del servicio operacional.
El Be-101 no tendrá problemas para obtener el certificado de aeronavegabilidad tanto en Rusia como en otros países y sin lugar a dudas se interesarán por el mismo los compradores extranjeros potenciales.
La oficina de diseño Ritsa está desarrollando, con asistencia de TANTK, un anfibio destinado a utilizarse en las regiones de difícil acceso. La masa de despegue es de 6 toneladas y la configuración es clásica. Destaca por su fuselaje hermético lo que le permite realizar vuelos a gran altitud. Será rentable cumpliendo misiones con alcance de hasta 400 kilómetros.
En la exposición de Guelendzhik la compañía TANTK exhibió el modelo del hidroavión superpesado de transporte Be-2500 que será provisto de seis unidades de propulsión. Sus características son las siguientes: longitud: 115,5 metros; apertura alar: 125,51 metros; peso de despegue máximo: 2500 toneladas; carga útil máxima: 1000 toneladas; velocidad de crucero máxima: 770 kilómetros por hora a la altitud de 10 kilómetros; alcance: 16.000 kilómetros. En un futuro justamente tales aparatos van a dominar el mercado internacional de servicios de transporte de cargas y pasajeros, afirma el director general de TANTK, Victor Kobzev.
