Kransoyarsk, 13 de noviembre, RIA Novosti. Una habitante de Krasnoyarsk, al manejar auto en estado de embriaguez, entró en un supermercado a través del escaparate, recorriendo varias decenas de metros por la sala, hasta chocar con una columna.
La policía vial, al arribar al lugar del incidente, descubrió que esa mujer de 50 años, además de estar borracha, no tenía licencia de conducir. Según dijo la detenida, ella "sabía conducir el tranvía solamente".
Sólo por haber roto los cristales del escaparate, la infractora tendrá que pagar 200 mil rublos, como mínimo.