TeleSUR / 13/08/2006. A dos meses de finalizada la mayor movilización de estudiantes secundarios en más de 30 años en la historia chilena, nuevas protestas desarrolladas esta semana, podrían revelar que el descontento por el actual sistema de educación continúa.
Ninoska Cortés, estudiante de la Comuna de Maipú, opina que la labor de la actual Comisión reformadora del sistema educativo chileno, presidida por la presidenta de Chile, Michelle Bachellet, "está haciendo un negocio con la educación. Nosotros estamos luchando por una educación gratuita e igualitaria para todos, y que no sea un negocio más del gobierno", explicó Cortés.
De acuerdo con el reporte de Pamela Sepúlveda, corresponsal de TeleSUR en Chile, tras las movilizaciones de casi un millón de secundarios chilenos entre mayo y junio pasados el gobierno constituyó un Consejo Asesor en el que participan también estudiantes y profesores, para proponer las reformas a leyes elaboradas durante la dictadura.
Sin embargo, algunos docentes como Jorge Pavez, quien funge como presidente del Colegio de Profesores de Chile, reconocen ciertos avances en dicho comité.
"Hay ya una voluntad mayoritaria de provocar cambios a la Ley Orgánica Constitucional de Educación, eso no se había visto antes, hay una voluntad mayoritaria de terminar con la municipalización de la educación", afirmó el educador.
Por su parte, los estudiantes no se muestran tan optimistas con el Consejo Asesor. Juan Carlos Herrera, vocero de la Asamblea Nacional de Estudiantes de Secundaria (ACES), apuntó que no ha habido la suficiente disponibilidad ni voluntad política para abordar los temas "puntuales" que solucionen los problemas. "Por lo tanto, creemos que dentro de unas semanas más, si esto no avanza, lo más posible es que nos retiremos del Consejo", dijo.
Pero, para Alejandro Traveso, Secretario Regional del Ministerio de Educación una suspensión de las conversaciones no entra en la planificación del Consejo.
"Estamos todos esperando ansiosos los avances que allí vayan a haber. Si a mí no me gusta la velocidad con que avanza el consejo, no me gusta lo que están diciendo los otros, yo no me puedo bajar a mitad de camino y si me bajo, obviamente no tiene ninguna importancia, porque van a seguir el resto", opinó.
La poca valoración de la participación de los estudiantes, y el hecho que de que finalmente serán Gobierno y parlamentarios quienes definan el futuro de la educación chilena, hacen plantear tanto a estudiantes como a profesores la necesidad de una nueva movilización nacional que acelere los cambios.
Para septiembre preparan un Congreso Social en el que elevarán las propuestas concretas sobre el tipo de educación que se desea en Chile.
