Moscú, 1 de agosto, RIA Novosti. El satélite surcoreano Compsat-2, colocado en la órbita espacial el 28 de julio con la ayuda de un cohete propulsor ruso, se encargará de realizar la vigilancia sobre el territorio de Corea del Norte, situación medioambiental, daño provocado por las inundaciones y las construcciones ilegales, informa la versión digital del diario Hankook Ilbo.
El aparato, desarrollado por el Instituto Aeroespacial de Corea, será capaz de transmitir a la Tierra las imágenes en color de objetos cuyo tamaño no supera un metro cuadrado, evitando la necesidad de comprar esas fotografías en el exterior.