VEDOMOSTI. El vocablo democracia no tolera calificativos algunos, sostiene el primer presidente adjunto del Gobierno ruso, Dmitri Medvedev.
Se da la impresión de que la entrevista con Medvedev, publicada ayer en la revista "Expert", dio pie a la verdadera confrontación ideológica en el escenario político nacional. Se trata precisamente del enfrentamiento entre el valedor de la "democracia soberana", Vladislav Surkov, jefe adjunto del Gabinete de la Presidencia, y el partidario de la democracia sin adjetivos, Dmitri Medvedev.
Ambos se desvelan como figuras notables en la vida política, disponen de una amplia gama de instrumentos administrativos, pero Medvedev es delfín de Putin, o sea, un hombre orientado al futuro, mientras Surkov, último de la cohorte de Yeltsin, según parece, tiene pocas posibilidades de salir adelante.
Dmitri Medvedev se puso a polemizar con Vladislav Surkov, platicando con Valeri Fadeev, director de la revista "Expert" y uno de los autores del documento programático intitulado "Modelo económico de la democracia soberana" que insertó en su sitio en Internet el partido pro presidencial "Rusia Unida". A primera vista, Medvedev se impone sobre su rival: "La democracia es un concepto absolutamente fundamental. Y se puede contraponerla sólo a los regímenes dictatoriales y totalitarios." Acto seguido, el primer presidente adjunto del Gobierno somete a críticas el término "democracia soberana", cuyo modelo el documento mencionado llama a introducir en Rusia. Medvedev lo interpreta como aspiración a aumentar el intervensionismo del Estado en la economía.
No obstante, el análisis detallado de los dos programas (publicado en el sitio de "Rusia Unida" y expuesto por Medvedev en entrevista a la revista "Expert") da motivos para afirmar que existen pocas diferencias en las posiciones de los polemistas. La única estriba en la terminología que utilizan.
