Moscú, 10 de julio, RIA Novosti. Las autoridades rusas han recrudecido su postura frente a las manifestaciones de la xenofobia y el extremismo, según se desprende de un informe elaborado por la Oficina Pro Derechos Humanos de Moscú.
‘Dejamos constancia de que las autoridades han reforzado en estos últimos años la retórica acusatoria y las declaraciones de condena frente a la xenofobia, el extremismo y el antisemitismo - señala Alexander Brod, jefe de esta ONG -. Al mismo tiempo, creemos que a esa retórica deberían seguirle programas públicos con la participación del Ministerio de Cultura, el de Educación y los cuerpos de seguridad'.
En el primer semestre de 2006, treinta cinco personas fueron sentenciadas en Rusia a diversas penas carcelarias a raíz de los crímenes inspirados por el odio racial o étnico (frente a 21 personas en 2005). En el mismo período se registraron casi 100 agresiones xenófobas que dejaron un saldo de 18 muertos y alrededor de 160 damnificados (diez asesinatos y casi 200 ataques en enero-junio de 2005). La mayoría de estos crímenes se produce en Moscú y San Petersburgo. Los naturales de Azerbaiyán, países africanos o los del Oriente Medio son las víctimas más frecuentes de esos ataques.
Los defensores de derechos humanos señalan en su informe que en Rusia hay una decena de grandes organizaciones que hacen propaganda del odio interétnico. De forma clandestina, se publican en el territorio ruso un centenar de periódicos ultranacionalistas.
