TeleSUR / 05/07/2006
La jueza chilena Romy Rutheford, acogió a trámite una demanda presentada contra el presidente electo de Perú, Alan García, por su supuesta responsabilidad en violaciones contra los derechos humanos durante su gobierno entre los años 1985 y 1990.
Rutheford, jueza del Segundo Juzgado del Crimen de Santiago, abrió la posibilidad de investigar a García por presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos entre 1985 y 1990 en medio de la lucha contra Sendero Luminoso.
La querella contra García fue interpuesta por un grupo de peruanos refugiados en Chile y patrocinada por los abogados Hugo Gutiérrez y Roberto Ávila.
Los querellantes tendrán 30 días de plazo para demostrar que los hechos de violaciones de derechos humanos imputados a García, no han sido juzgados en Perú, según la condición impuesta por la jueza.
La juez sostuvo que el elemento determinante del ejercicio extraterritorial de la jurisdicción, es la protección de valores comunes y no la simple invocación de la soberanía de un Estado.
Insistió que el principio de la justicia universal autoriza la persecución extraterritorial, precisamente de aquellos delitos que revisten las características de crimen contra la humanidad.
Advirtió que la jurisdicción universal sólo entra en funcionamiento para los mencionados delitos, cuando se trata de crímenes de lesa humanidad.
García dijo hace dos semanas durante su visita a Chile donde se reunió con la presidenta Michel Bachele, que sus acusadores eran minoritarios y que ignoraban que ya su persona fue investigado en Perú, donde fue absuelto por las autoridades.
Sin embargo, el pronunciamiento de la juez chilena pareciera asomar otra historia por lo que habrá que esperar para conocer cómo se define la querella interpuesta por un grupo de peruanos.
