Por Andrei Kisliakov, RIA Novosti. Se considera que el nacimiento de la industria rusa de cohetería se debe al decreto "Cuestiones de cohetería militar" aprobado por el Partido Comunista de la Unión Soviética en mayo de 1946.
Sea como fuere, no ha sido la cohetería militar la que ha convertido a Rusia en una de las principales potencias espaciales del siglo XXI, sino la cohetería civil. Precisamente los cohetes portadores habían llevado al espacio el primer satélite artificial y al primer cosmonauta la Tierra. Pasados años, los vehículos impulsores rusos Soyuz y Proton continúan siendo unos de los medios técnicos más demandados en el mundo.
He aquí las principales etapas de la historia de la cosmonáutica rusa:
1946 - el primer cohete abandona los límites exteriores de la atmósfera terrestre: EE UU lanzó un cohete que ascendió a 80 km. En la URSS queda aprobado el decreto sobre desarrollo de la cohetería militar y nace la industria de cohetería espacial.
1949 - lanzado en la URSS el primer cohete sonda para estudios geofísicos y comienza la investigación de la estratosfera.
1955 - arranca la construcción de la base espacial de Baikonur.
1956 - ensayado con éxito el primer cohete balístico soviético de propelente líquido R-5M.
1957 - Unión Soviética lanza el primer misil balístico intercontinental de varias etapas R-7, y coloca en órbita el primer satélite artificial de la Tierra.
1958 - insertado en la órbita el primer laboratorio para explorar de forma íntegra del espacio cósmico.
1959 - los cohetes soviéticos alcanzan la segunda velocidad cósmica. Como resultado, una sonda espacial soviética llegó a la superficie lunar y otra dio una vuelta a la Luna. Fue lanzado el primer satélite artificial del Sol.
1960 - lanzada en régimen no tripulado la primera nave espacial soviética.
1961 - vuela al espacio el primer cosmonauta del mundo Yuri Gagarin.
1962 - lanzado el primer satélite desde la base espacial de Kapustin Yar. Realizado el primer vuelo conjunto de dos naves espaciales.
1963 - colocados en órbita el primer aparato espacial capaz de maniobrar y la primera nave espacial multiplaza.
1965 - el cosmonauta soviético Alexei Leonov realiza la primera caminata espacial. La URSS lanza el primer satélite de comunicaciones.
1967 - especialistas soviéticos obtienen la primera imagen de la Tierra en color hecha desde el espacio. Realizado el primer acoplamiento de dos satélites.
1978 - creada y aprovechada con éxito una nave espacial de carga.
1988 - efectuado el primer y único lanzamiento del transbordador espacial ruso "Buran".
En la etapa actual, las tareas clave del desarrollo de los lanzadores rusos consisten en modernizar los vehículos impulsores básicos Soyuz y Proton (80% de lanzamientos anuales), crear impulsores de un solo uso a partir de la unificación racional de sistemas, equipos y unidades de aceleración, y continuar el desarrollo de los lanzadores tradicionales implantando las tecnologías más promisorias.
Las principales exigencias para los impulsores modernos son la competitividad en el mercado mundial de los servicios de lanzamiento, la fiabilidad y la seguridad.
En el período entre 2000 y 2005 se había cumplido un enorme trabajo para modernizar los lanzadores básicos. En particular, aumentaron sus capacidades energéticas, incrementó la precisión de la puesta en órbita de los ingenios espaciales y disminuyó el efecto perjudicial en el entorno. Fueron ensayados con éxito los impulsores modernizados Soyuz-FG, Soyuz 2-1 y Proton-M, así como las nuevas unidades de aceleración Fregat y Briz-M.
La experiencia acumulada en la creación de los vehículos impulsores a partir los misiles militares retirados del servicio operacional ha permitido incrementar la producción de lanzadores de clase ligera. A modo de ejemplo se puede citar la intensa explotación comercial de los vehículos impulsores Dnieper (creado a partir del misil RS-20), Strela (RS-19) y Rokot (RS-18).
Como resultado, hacia finales de 2005 en Rusia había 10 tipos de lanzadores y 3 tipos de unidades de aceleración. Sirven para lanzar aparatos espaciales a las más distintas órbitas -bajas, medias, altas, circulares, elípticas- y colocar sondas en trayectorias a otros cuerpos celestes del Sistema Solar.
El alto rendimiento económico y la fiabilidad de los vehículos impulsores rusos les aseguran una estable demanda en el mercado mundial de servicios de lanzamiento. En 2005, el 45% de todos los lanzamientos comerciales efectuados en el mundo había correspondido a los impulsores rusos.
Por acuerdo que han firmado Rusia y Kazajstán, en la base espacial de Baikonur se ha procedido a crear un centro de lanzamientos, Bayterek, donde se aprovechará el lanzador Angara-A5. Ese cohete reemplazará al impulsor de clase pesada Proton utilizado actualmente en Baikonur. La creación del centro de lanzamientos intensificará la cooperación entre Rusia y Kazajstán en la exploración del espacio.
La aspiración de Rusia a colaborar con otros países lo confirma el proyecto de creación de otro centro de lanzamientos, Soyuz, en la base espacial de Kourou (Guayana Francesa). Dicho proyecto es elemento de la cooperación a largo plazo establecida entre Rusia y Europa.
Rusia tiene acumulada una rica experiencia en el desarrollo de transbordadores espaciales. Así, entre 1970 y 1988 fue creado el sistema Energía-Buran. El transbordador Buran había aterrizado en modo automático durante los ensayos de vuelo.
El aprovechamiento de los transbordadores permite abaratar la colocación en órbita de cargas útiles, ampliar las posibilidades de las operaciones de transporte y aumentar la seguridad, incluida la seguridad ecológica.
A mediados del presente año, la Agencia Federal Espacial ("Roskosmos") deberá elegir el proyecto de transbordador espacial. Por lo visto, será el proyecto Cliper desarrollado por la Corporación de Cohetería Espacial "Energía". El transbordador Cliper sería llevado al espacio por el cohete Soyuz 2-3 que está desarrollando el centro espacial de Samara.
