Moscú, 28 de junio de 2006 (Especial para Ria Novosti) El Gobierno del Presidente Evo Morales Ayma, a cinco meses de la asunción al poder, puso en marcha el Plan Nacional de Desarrollo "Bolivia Digna, Soberana, Productiva y Democrática para Vivir Bien".
De acuerdo a las expresiones del Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de Bolivia en la Federación de Rusia, Sergio Sánchez Ballivián, el objetivo de dicho plan, de corte quinquenal, consiste en revertir la profunda desigualdad social y la exclusión de la mayoría de la población boliviana, particularmente la de origen indígena, a través del cambio de patrón de desarrollo primario exportador existente en la actualidad (caracterizado por la explotación y exportación de recursos naturales sin valor agregado), por uno que contenga la agregación de valor y la industrialización de los recursos naturales renovables y no renovables.
Este cambio del patrón de desarrollo presentado por el Gobierno, según explica el Embajador boliviano requiere que el Estado no solo sea un conductor del desarrollo, sino que es indispensable que participe como promotor y protagonista del desarrollo nacional que se propone construir y de la estrategia para conseguirlo. Como lineamientos básicos, el diplomático boliviano en nuestro país menciona:
La construcción del poder social territorializado; la protección social con la incorporación de activos y el acceso irrestricto a los servicios sociales; la conformación de la matriz productiva integrada por la transformación de los recursos naturales en los sectores estratégicos -en los cuales interviene el Estado como productor- y la revolución de la producción diversificada e integrada, basada en el trabajo y el conocimiento en los sectores generadores de empleo e ingresos; complementados por la vinculación y articulación productiva de las comunicaciones y el transporte, además de los servicios de financiamiento e innovación tecnológica y la sostenibilidad macroeconómica y sus proyecciones.
