Este lunes comienza la admisión de solicitudes para comprar acciones de la petrolera Rosnef en el marco de su Oferta Pública Inicial (IPO). Simultáneamente en Londres arrancará el 'road show' de las acciones de esa compañía estatal rusa. Expertos coinciden en que no es el mejor momento para la IPO: en mes y medio, las acciones de las compañías rusas han bajado de precio un 50 por ciento. Además, el 'caso Yukos' ha envuelto a Rosneft en un conflicto corporativo larvado.
"La coyuntura de los mercados no es favorable -dice Alexander Razuvaev, analista de la compañía Megatrustoil-. El volumen de la IPO será notable, pero también es notable la inestabilidad en los mercados".
Los auditores de bancos y las compañías rusas presentan distintas valoraciones de la capitalización de Rosneft. Las compañías de inversiones que participan en la preparación de Rosneft para la IPO calculan la capitalización de la petrolera en 70 ó 90 mil millones de dólares, mientras que los analistas independientes señalan que se trata de 40 a 60 mil millones.
"La valoración de la capitalización de Rosneft es algo exagerada", afirma Maxim Shein de la compañía Brokerservicecredit, y muchos expertos comparten su opinión.
Los inversores podrían sentir temor por los intentos de Yukos de impedir la realización de la IPO en la Bolsa de Valores de Londres. "En ese aspecto, los inversores potenciales de Rosneft nada tienen que temer", asegura Razuvaev.
"Es evidente que el grupo Menatep seguirá litigando con Rosneft y esta guerra corporativa se extenderá por largos años. Pero nadie conseguirá quitarle a Rosneft sus activos. El modelo empresarial de Rosneft supone que esos activos quedan en Rusia y, por lo tanto, están al amparo del Estado. De manera que no veo ningunos riesgos para los inversores", comentó el analista.
