Tallinn, 6 de junio, RIA Novosti. Estonia no ha definido aún su postura con respecto a la participación en el proyecto NEPG (North European Gas Pipeline) que contempla la construcción de un gasoducto en el fondo del Mar Báltico.
El Gobierno debería preguntarse, si quiere o no tender un ramal hacia Estonia, cuánto estaría dispuesto a pagar por ello y si tiene más sentido invertir los recursos en la modernización de los depósitos del gas existentes en el territorio de Letonia, señaló el martes el primer ministro estonio, Urmas Paet, al añadir que todas esas interrogantes requieren de un análisis detallado al nivel de expertos.