Krasnoyarsk, 1 de junio, RIA Novosti. Los vecinos de Dudovka, una aldea situada en la provincia rusa de Krasnoyarsk, en Siberia, llevan varios días asediados por los osos que han salido de la taiga y han cometido ya siete ataques contra el ganado doméstico.
La gente ha dejado de sacar el ganado al pasto y, de noche, prefiere no salir de casa sin necesidad especial. Los cazadores han organizado una guardia permanente en torno a la aldea. Los viejos del lugar dicen que la última invasión de predadores a tamaña escala ocurrió hace 60 años y echan la culpa al duro invierno que ha dejado a los animales, recién despertados de su hibernación, sin la habitual comida.
