Según informó el corresponsal de Sputnik, los presidentes de las cinco naciones estamparon sus firmas durante una ceremonia solemne que marcó el cierre de la V Cumbre del Caspio.
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El documento mantiene el Caspio como una zona compartida, pero divide los fondos marinos y los recursos submarinos entre los cinco Estados.
La Convención prevé asimismo que los proyectos marinos a gran escala tengan en cuenta el impacto ambiental.
El acuerdo destaca además que es inadmisible la presencia de las fuerzas armadas de las potencias extrarregionales en el mar Caspio y deposita en Azerbaiyán, Irán, Kazajistán, Rusia y Turkmenistán la responsabilidad por el mantenimiento de la seguridad marítima y la gestión de sus recursos.
El presidente de Kazajistán, Nursultán Nazarbáev, precisó que la Convención establece un mar territorial de 15 millas para cada país.
"A las aguas territoriales se adiciona una zona pesquera de diez millas, en la que cada Estado tiene derechos exclusivos para la pesca", añadió.
Por su parte, el presidente ruso Vladímir Putin destacó que la Convención "garantiza la solución de todos los temas acuciantes de la agenda bajo consenso y teniendo en cuenta los intereses mutuos, garantiza el estatus del mar Caspio como una zona de paz".
"Hoy las relaciones entre Irán y el resto de países del Caspio son amistosas y francas", remarcó.
El mar Caspio, enfatizó, pertenece a las cinco naciones.
"Hemos sido claros al declarar que ninguna fuerza militar extranjera, ningún buque de guerra extranjero puede entrar en las aguas del Caspio", subrayó.
