El portavoz también destacó que en los últimos años los representantes de la OTAN comenzaron a informar "de estas molestias" post factum y durante eventos culturales en las que están presentes los medios.
"Todos los vuelos de nuestra aviación se realizan en concordancia estricta con las reglas internacionales y los requisitos de seguridad", aseguró Konashenkov.
El representante del ministerio señaló que, como Su-24 es un bombardero táctico y Il-38 es un avión de patrulla marítima y guerra antisubmarina, ninguno de los dos "realiza maniobras bruscas ni acercamientos repentinos, como lo hacen los cazas".
"Si los pilotos estadounidenses sienten una fuerte preocupación al detectar en el aire a alguien más no creo que sea un problema de Rusia", agregó.