La joven modelo, de 24 años, no figuraba entre las favoritas del certamen de belleza, pero logró imponerse a las finalistas de Haití y Colombia y recibió la tiara de manos de la anterior vencedora, la filipina Pia Wurtzbach.
Mittenaere estudia odontología, le gustan los deportes extremos, incluido el paracaidismo, y quiere trabajar con niños.
Durante la sesión de preguntas de la competición, la belleza gala alabó las fronteras abiertas de su territorio para los refugiados.
"En Francia queremos tener el mayor intercambio de gente", dijo a los jueces.
Así, el país galo recibe su segunda corona. La primera la logró Christiane Magnani, que se convirtió en ganadora de Miss Universo en 1953.
La haitiana Raquel Pélissier se llevó el virreinato. La mujer sobrevivió al devastador terremoto de 2010. Por el momento cursa optometría. Uno de sus objetivos es encontrar la cura para la ceguera.
Miss Colombia, Andrea Tovar, era la gran favorita para muchos, si bien acabó en tercera plaza. La chica, de 23 años, estudia Diseño Industrial y Producción de Imagen Fotográfica, y planea dedicarse a trabajar como diseñadora industrial con personas indígenas.
