"Confiamos en que hay posibilidades de que la OTAN y Rusia se enfoquen en las amenazas reales a la seguridad, como el terrorismo, (el conflicto en) Afganistán, inestabilidad regional", dijo el embajador en entrevista al periódico estadounidense The Wall Street Journal.
Apuntó que Rusia "está dispuesta a continuar la cooperación en diferentes situaciones".
Grushkó además llamó a la Alianza Atlántica a dejar de considerar a Rusia como un Estado "agresor" y frenar "preparativos militares".
Respecto a estas acusaciones, Grushkó dijo que Rusia llevó al cabo aquellos ejercicios para examinar la "vitalidad" de sus fuerzas nucleares.
"Todas estas historias sobre los llamados simulacros de ataques nucleares contra otros países no corresponden a la realidad", recalcó.
A la vez recordó que Rusia últimamente redujo sus fuerzas estratégicas y armas nucleares.