El mandatario además dijo que "el terrorismo y el extremismo se propagan allí donde el Estado se destruyó y desapareció".
Agregó que este es el caso de Afganistán, que sufrió varias invasiones militares extranjeras que destruyeron el Estado, y también de Libia, donde debido a la injerencia foránea se perdió la estabilidad interna y el Estado se destruyó.
La estabilidad y el orden interno importan mucho para cada país, su pérdida crea condiciones propicias para la propagación del terrorismo, indicó.
También señaló que se está cambiando todo el sistema de relaciones internacionales, se agudizan las contradicciones entre las grandes potencias, se usan las palancas de presión, se erigen barreras comerciales, disminuyó la confianza entre los principales Estados del mundo.
"Eso significa que no se cumplen los compromisos internacionales asumidos anteriormente por los países del mundo", resumió.