"El objetivo proclamado, de que grupos entrenados y armados de 'insurgentes moderados' combatan a los terroristas del Estado Islámico, parece dudoso", dice una nota publicada en la web de Exteriores.
El documento señala que Ankara y Washington "siguen ignorando una fuerza real, a saber, el Ejército gubernamental de Siria que se enfrenta a terroristas".
Tampoco está claro, según la Cancillería rusa "dónde van a parar dentro de algún tiempo miles de combatientes armados, de qué lado y contra quién van a luchar".
En realidad, indica la nota, se trata de "proseguir con la misma línea de apoyar en Siria a aquellos que quisieran salirse con la suya por la fuerza sin reparar en las víctimas de un conflicto fratricida y en los sufrimientos de la población civil".
La víspera, Turquía y EEUU firmaron un acuerdo para entrenar y equipar a fuerzas de oposición siria.
Según algunos datos, en el marco del programa que arrancará en marzo, Washington planea entrenar en Turquía, Jordania y Arabia Saudí hasta 5.000 opositores moderados sirios al año durante el próximo trienio.