Ese precio es el más bajo para la mezcla de crudos mexicanos desde el 29 de mayo de 2009, y su caída desde el máximo de este año 2014 llega a casi la mitad de ese pico anual, un derrumbe similar para todos los productores petróleos en el mundo.
El crudo ligero de referencia del Brent del Mar del Norte retrocedió 2,48 dólares, a precio de 64.24 dólares por barril, y el estadounidense West Texas Intermediate (WTI) perdió 2,34 dólares al venderse en 60.94 dólares por barril.
El precio del barril de la mezcla de crudos de México —décimo productor mundial de petróleo- registró su punto más alto de 2014 en junio, cuando alcanzó el precio de 102,41 dólares por barril, un derrumbe del 47 por ciento al precio de hoy, según datos oficiales.
Analistas mexicanos estiman que las expectativas de un bajo crecimiento en la demanda y una producción elevada del energético, estimulada por productores de hidrocarburos shale en EEUU, influyen en el incremento en los inventarios de crudo y bajos precios.
Las finanzas públicas de México dependen en una tercera parte de los impuestos que paga la petrolera estatal Pemex.
El gobierno y el Congreso estimaron el precio promedio anual para 2015 en 79 dólares, casi 25 dólares arriba del precio actual.
Sin embargo, el gasto público está a salvo por las garantías adquiridas por México en los mercados a futuro, asegurados con garantías adquiridas por 770 millones de dólares.