México aumentará su producción de gasolina y diesel de 180.000 barriles diarios (b/d) a 300.000 b/d en la refinería de Tula, la segunda de las seis plantas del país, gracias a una reconfiguración que culminará al final del mandato del presidente Enrique Peña, en 2018, con el fin de reducir las importaciones de refinados.
La inversión tendrá un costo de unos 4.600 millones de dólares, informó Pemex en un comunicado.
La refinería de Tula (95 km al norte) será respaldada en sus operaciones por una terminal de almacenamiento, cercana a la planta principal, con un costo de 1.200 millones de dólares, en los terrenos donde originalmente se planeó construir una nueva refinería; pero ese proyecto ha sido desechado.
La dependencia crónica de la importación de gasolinas, primordialmente de EEUU, obliga a México, octavo productor mundial de crudo, a importar el 50 por ciento de la gasolina que consume, de acuerdo con datos de la Secretaría de Energía.
Durante el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012), la principal estrategia contra la importación de de la mitad de las gasolinas y refinados consumidas, consistía en construir en Tula una nueva refinería, con un costo de 10.000 millones de dólares, pero con el anuncio de este miércoles ha quedado sepultada.
La reconfiguración consiste en añadir una planta productora de coque en Tula, la segunda mayor refinería de Pemex, que además permitirá incrementar la conversión de destilados del 60 al 80 por ciento, dijo la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) en un comunicado.
Reconfigurar Tula "es la opción que resulta económicamente más atractiva desde el punto de vista-beneficio para ir cerrando la brecha entre la oferta y demanda de combustibles en el país", dijo el director general de Pemex Emilio Lozoya en la ceremonia.
Pemex invertirá 20.000 millones de dólares en el mandato del presidente Peña (2012-2018) en proyectos de refinación, como las reconfiguraciones de las refinerías de Tula, y otras dos de las seis refinerías con las cuales cuenta México, así como las plantas de ultra bajo azufre de gasolinas y diesel.
Las otras dos refinerías que serán modernizadas son la de Salina Cruz, Oaxaca (725 km al sureste) la más grande del país, y Salamanca, Guanajuato, (250 km al noroeste),la quinta en capacidad de las seis.
Esos proyectos crearán 18.000 empleos directos y 38.000 indirectos, calcula Pemex.
Este proyecto reducirá en 10 por ciento la producción de combustóleo, el más contaminante y menos rentable que los destilados como la gasolina y el diesel.
México registra este año su peor nivel de producción de petróleo crudo en la historia de sus registros disponibles desde 1990, con 2,36 millones de barriles diarios de crudo equivalente, de los cuales exporta, 1,14 millones de barriles, reportó el 28 de noviembre Pemex.
México alcanzó su pico histórico de producción de crudo en 2004 con 3,4 millones de b/d).
El precio de la mezcla de crudo mexicano en los mercados internacionales cayó a 60,67 dólares por barril, unos 28 dólares debajo de la estimación del presupuesto federal de 2014 (calculada en 79 dólares por barril).
