España mantiene el aprobado en el Índice de Percepción de la Corrupción presentado hoy en Madrid por la organización Transparencia Internacional (TI).
A pesar de los numerosos escándalos de corrupción política y económica, España se sitúa en la posición número 37, de 175 países, y sube tres puestos.
Respecto a los países de su entorno, España obtiene el punto intermedio de la clasificación.
El 69% de los países estudiados ha suspendido en transparencia.
En la zona superior del ranking figuran Dinamarca, Nueva Zelanda y Finlandia. Entre los peor colocados se encuentran Somalia, Corea del Norte y Sudán.
Jesús Lizcano, catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid y presidente de Transparencia Internacional en España, estimó hoy en una rueda de prensa que se "consolida" la caída de España "porque ha obtenido un punto más que el año pasado, pero no ha superado la pérdida de cinco puntos con respecto a 2012, algo que no supone un cambio real".
La corrupción "no es sistémica" en España, según Lizcano, ya que "se centra en el ámbito político con la complicidad de ciertas empresas".
La crisis económica no ha hecho más que aumentar el conocimiento sobre la corrupción. Alejandro Salas, de TI, señaló que "la corrupción no es nueva en España, es un fenómeno histórico. Cuando la economía iba bien, se ignoraba, se vivía con eso como con algo que no molesta. Ahora ya los escándalos no se esconden. Los líderes de opinión hablan de ello y hay propuestas para mejorar".
Por su parte, José Ugaz, presidente mundial de la organización, destaca en el documento que "los países de la parte inferior de la clasificación deben adoptar medidas contra la corrupción radicales en favor de su pueblo. Mientras que, los países en la parte superior del índice deben asegurarse de que no exportan prácticas corruptas a los países subdesarrollados".
