Nueve activistas de Greenpeace han desplegado una pancarta de 126 metros cuadrados en el Viaducto de Madrid para denunciar la "fuerte represión del Gobierno español a la acción pacífica contra las prospecciones de Repsol en Canarias, el pasado sábado 15 de noviembre".
El lema de la pancarta es "defender el medio ambiente, nuestro derecho y deber".
Greenpeace denuncia la detención de su barco Arctic Sunrise por parte del Ministerio de Fomento y la "violenta actuación" contra ellos por parte de la Armada española, que dejó tres activistas heridos.
The Canary Islands are not for sale! http://t.co/lOnpLJWVKg ► http://t.co/bnHHPsiwsJ
— Greenpeace (@Greenpeace) 25 ноября 2014
"Cada día que el Arctic Sunrise está detenido es un día menos que está defendiendo el medio ambiente, y por ello hemos reunido el dinero para liberarlo, gracias al apoyo de socios y simpatizantes", explicó Mario Rodríguez, director de Greenpeace.
La organización ha abonado 50.000 euros de aval para poder utilizar de nuevo el barco y continuar con las protestas.
La semana que viene comienza el juicio más complicado para Greenpeace en sus 30 años de activismo en España.
Un fotoperiodista independiente y 16 activistas se enfrentan a 3 años de cárcel por una acción en la central nuclear de Cofrentes, en Valencia.