Serbia debe imponer sanciones a Rusia si quiere entrar en la Unión Europea, advirtió el comisario europeo para la Política de Vecindad y las Negociaciones para la Ampliación, Johannes Hahn, en vísperas de un viaje al país báltico.
"Serbia se ha comprometido jurídicamente en las negociaciones de ingreso a ir coordinando con la UE su postura en asuntos complicados como las sanciones contra Rusia", dijo Hahn en una entrevista que publica este jueves el diario serbio Novosti.
Bruselas "espera que Belgrado cumpla con este compromiso", subrayó el eurocomisario.
Al mismo tiempo, aseguró, la UE comprende los vínculos históricos entre Serbia y Rusia y por tanto "no obliga a Belgrado a una elección", aunque el Gobierno serbio declaró como objetivo estratégico clave la integración del país en el espacio comunitario.
"Esperamos de las autoridades serbias nuevas muestras de su compromiso con el objetivo estratégico clave de ingresar en la UE", indicó Hahn.
El responsable europeo de la Política de Vecindad y las Negociaciones para la Ampliación visita el país balcánico este jueves.
El martes pasado, Hahn hizo en Bruselas unas declaraciones en sentido contrario, al afirmar que la Comisión Europea no vincula el progreso de las negociaciones sobre el ingreso de Serbia a su postura ante las sanciones a Rusia.
El diputado ruso Alexandr Pushkov ha criticado las declaraciones de Johannes Hahn.
"Se trata de hecho de un chantaje a Serbia: o se suma a las sanciones o deja de ser un país candidato a entrar en la UE", dijo Pushkov, que preside Comisión de Asuntos Internacionales de la Duma de Estado, en una rueda de prensa en Rossiya Segodnya.
La paradoja, según el parlamentario ruso, es que Belgrado en cualquier caso no será aceptada en la UE en un futuro próximo.
"Si Serbia opta por la vía de las sanciones contra Rusia, acabará sucumbiendo al chantaje, pero igualmente no logrará ser admitida a la UE en menos de un año", pronosticó.
