El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, declaró que emisarios de EEUU viajan a otros países exigiendo que se unan a las sanciones impuestas contra Rusia.
"Hace poco me reuní en Pekín con el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, y le dije abiertamente que los emisarios estadounidenses viajan por el mundo entero y no queda ni un solo gobierno al que no hayan acudido exigiendo con más o menos insistencia que apoyen las sanciones contra Rusia", afirmó Lavrov al intervenir ante el Parlamento ruso.
El ministro recalcó que "en la mayoría de los casos esa táctica no funciona" y añadió que le parece vergonzoso "que una gran potencia se dedique a recorrer el globo para obligar a que se realice un seguidismo de su política".
Subrayó que Moscú, a diferencia de EEUU, está dispuesta a cooperar con Washington en todos los ámbitos donde coincidan los principales intereses de los dos países y no solo para obtener beneficios.
"Nuestra política exterior no se basa en principios arbitrarios, estamos dispuestos a cooperar con nuestros socios en los ámbitos donde coincidan nuestros intereses fundamentales: la lucha antiterrorista, contra el Estado Islámico y otros grupos que causan terror en toda la región", señaló Lavrov.
La Unión Europea y EEUU pusieron en marcha varios paquetes de sanciones contra Moscú que afectan a particulares, empresas concretas y a sectores enteros de la economía rusa.
En respuesta, Rusia embargó por un año algunas importaciones alimenticias de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega, en particular de productos cárnicos, avícolas, lácteos, pescados, mariscos, frutas y verduras.
