La mayor ciudad de Sudamérica, con sus 21,8 millones de habitantes, registró 27.721 casos de dengue entre enero y noviembre de 2014 lo que supuso un aumento de más de 10 veces respecto a los 2.617 casos registrados en 2013, según los datos divulgados este martes por la Secretaría Municipal de Salud de Sao Paulo.
En concreto, el elevado número de casos sitúa la tasa de incidencia del dengue en la ciudad en 246,3 por cada cien mil habitantes, es decir, el valor más alto en la última década aunque fuentes municipales señalan que el 98,6% de los casos se produjeron en la primera mitad del 2014.
Esto podría explicarse por la intensidad de la sequía en los últimos meses que afectaría a la capacidad de reproducción del mosquito transmisor de la enfermad, el Aedes aegypti, que necesita de lugares húmedos para su reproducción.
A pesar de que la epidemia comienza a remitir, la Secretaría Municipal de Salud de Sao Paulo ha decidido crear locales de prevención y atención a los enfermos con el objetivo de "fortalecer el contacto con la comunidad y el trabajo integrado en acciones de campo".
La medida además servirá de contención ante una eventual expansión de la fiebre chikungunya que comienza a aumentar su presencia en la región sureste del país proveniente de las zonas limítrofes con la Guyana y Venezuela, donde se declaró la alerta epidemiológica y se sobrepasaron los 820 casos en el mes de octubre.
Por su parte, ciudades como Río de Janeiro llevaron a cabo programas experimentales el pasado mes de octubre con la liberación de 10.000 mosquitos de la especie Aedes aegypti modificados genéticamente para albergar la bacteria Wolbachia y con ello imposibilitar su capacidad de trasmitir el virus no solamente en el presente año sino en el futuro ya que el efecto de la alteración de los mosquitos es hereditario.
