El presidente español, el conservador Mariano Rajoy, pidió hoy perdón a todos los españoles por los numerosos escándalos de corrupción que salpican a su formación, el Partido Popular.
En una declaración sin preguntas en el Senado, el dirigente se disculpó el mismo día que el exsecretario general de su partido, Ángel Acebes, declaraba en la Audiencia Nacional sobre una supuesta contabilidad en negro dentro de su formación y de comprar acciones en un medio de comunicación de su órbita política con apuros económicos con dinero negro.
También 24 horas después de conocerse una de las mayores macrooperaciones contra la corrupción municipal y regional que ha vivido España en democracia. Y tras el escándalo del despilfarro de tarjetas en negro en Bankia, un banco rescatado con 24.000 millones de euros de dinero público, y que afecta, entre otros a un alto dirigente de su partido Rodrigo Rato, ex gerente del Fondo Monetario Internacional.
"Pido perdón en nombre del Partido Popular a todos los españoles por haber situado en puestos de los que no eran dignos a quienes en apariencia han abusado de ellos", dijo ante la Cámara Alta.
"Entiendo, comprendo y comporto la indignación y el hartazgo de los ciudadanos" siguió Rajoy, para puntualizar que en la Operación Púnica contra la corrupción municipal no hay financiación irregular de su partido, sino que "responde a la codicia personal" de algunos dirigentes populares.
"Esos comportamientos extienden una sospecha generalizada", dijo Rajoy, "pero esa mancha ensucia injustamente la imagen y la reputación de la mayoría de las gentes de los partidos", recalcó.
Rajoy, en una declaración fuera de guión, reiteró su objetivo de "limpiar la vida pública" y avanzó que ampliará el abanico de medidas anticorrupción aunque sea en solitario. Los socialistas del PSOE, en la oposición, retiraron ayer su apoyo al PP para firmar un pacto político de buenas prácticas.
"Ni ha habido, ni hay, ni habrá un pacto con el PP", dijo tajante el secretario de Organización del PSOE, César Luena.
"La democracia no puede permitir que nadie juegue con la confianza que depositan en los políticos. Por ello vamos a aprobar las dos medidas anticorrupción pendientes, cuanto antes, el Estatuto del alto cargo y la ley del control de la actividad económica y financiera de los partidos", anunció Rajoy.
"Si es con el consenso de la oposición, mejor, pero si no es así, sacaremos adelante las medidas anticorrupción con los votos del PP", aseguró.
En un debate muy tosco y con gritos de dimisión para Rajoy, los socialistas exigieron explicaciones con preguntas ante los numerosos escándalos que azotan al partido en el poder, desde los supuestos sobresueldos a sus dirigentes, la caja B del partido o las donaciones irregulares a cambio de favores políticos.
