El Gobierno de España ha enviado hoy mismo 300 antidisturbios de la Policía Nacional a Cataluña. Este envío se produce un día después de las movilizaciones masivas y pacíficas contra la suspensión de la consulta independentista por parte del Tribunal Constitucional.
El objetivo, según el Ministerio de Interior, es reforzar "la seguridad en los edificios del Estado en caso de que se produzcan incidentes".
Desde el ministerio han recordado que el 9 de septiembre se elevó en Cataluña el grado de intensidad de alerta terrorista de bajo a alto dentro de un nivel II. Según el organismo del Gobierno, el objetivo es prevenir cualquier acción del terrorismo yihadista que pretenda atentar contra intereses occidentales.
Otra de las razones que señala Interior, es la puesta en marcha de un plan especial contra la delincuencia itinerante.
Hasta el momento no ha reconocido que la causa esté relacionada con las protestas catalanas que piden que reclaman la consulta soberanista, que se han intensificado en las últimas semanas. Sin embargo, en algunos medios policiales, sí dan por hecho que el motivo es ese y que de aquí al 9 de noviembre, fecha prevista para la votación independentista, se destinarán más antidisturbios a Cataluña.
No es la primera vez que el Gobierno central decide aumentar el número de antidisturbios en Cataluña. Durante el violento desalojo de Can Vies, una centro social autogestionado de Barcelona, también más de 300 agentes se movilizaron a Barcelona para blindar los edificios del Estado.
