El titular del juzgado número 2 de Melilla ha imputado al comandante jefe de la Guardia Civil de esta ciudad española situada en África, Ambrosio Martín Villaseñor, por un "presunto delito de prevaricación".
Según el juez, el agente "podría haber ejecutado "devoluciones en caliente" de inmigrantes desde España a Marruecos". Esta práctica está prohibida en España por la Ley de Extranjería y el convenio bilateral hispano-marroquí.
Gracias a esta práctica, los emigrantes no pueden acogerse al derecho de asilo en España al ser devueltos inmediatamente, sin ser identificados.
El magistrado, que ha pedido que el agente declare el 3 de octubre, se basa en los hechos ocurridos el 18 de junio y el 13 de agosto, en los que tras un salto a la valla en Melilla de cientos de inmigrantes, "pudieron haber sido entregados de manera inmediata a las fuerzas auxiliares marroquíes sin aplicar la legislación" española, según detalla el auto.
El juez aclara que si esto se confirma "puede ser constitutiva de una infracción penal".
La querella por la actuación policial en la valla fue interpuesta por varias organizaciones y asociaciones de derechos humanos españolas, entre ellas Andalucía Acoge, SOS Racismo y Prodein. Las ONG entregaron varios vídeos grabados por periodistas como prueba.
