El Congreso de México pidió la noche del jueves al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, “lineamientos básicos” para dar seguridad a los niños migrantes no acompañados que ingresan ilegalmente a ese país vecino y la urgente probación de una reforma migratoria.
La declaración oficial fue emitida ante la crisis humanitaria por unos 52.000 menores centroamericanos sin padres, retenidos en los últimos ocho meses en centros de detención en la región fronteriza entre México y Estados Unidos
La Comisión Permanente del poder Legislativo, que opera en los lapsos de receso de verano en México, pido al presidente Obama “emitir en forma directa e impostergable una serie de lineamientos básicos para dar seguridad real a estos niños migrantes no acompañados”.
El argumento de los legisladores mexicanos es la alarmante “crisis humanitaria que se desató ante el disparo del flujo de niños migrantes centroamericanos no acompañados y por la indefinición del Congreso estadunidense de su reforma migratoria”
El presidente de la Comisión Permanente del Congreso, Marcos Aguilar, llamó a los congresistas estadunidenses a “reconsiderar su posición y avanzar en la discusión de la reforma migratoria”.
El senador Aguilar, pidió “respetuosamente” al presidente de Estados Unidos que “a falta de un consenso en el Congreso de su país y tomando en cuenta sus facultades como Jefe del Poder Ejecutivo, emita lineamientos básicos que ofrezcan más certidumbre a los niños migrantes no acompañados”.
El pronunciamiento fue suscrito todos los grupos parlamentarios de los partidos mexicanos en el Congreso y “exhorta a los legisladores de Estados Unidos a hacer realidad la señalada reforma migratoria que impulsa la Casa Blanca”.
Los legisladores mexicanos llamaron a los congresistas estadunidenses a “reconsiderar su posición –que congela desde mediados del año pasado una reforma migratoria propuesta por Obama- y avanzar en la discusión de la reforma migratoria antes de que concluya el año legislativo”, el 31 de julio próximo.
La Comisión Permanente del Congreso también solicitó a los presidentes de todos los países involucrados en el tema de migrantes –Estados Unidos, México, Guatemala, El Salvador y Honduras- “suscribir convenios que garanticen los derechos humanos de los niños migrantes no acompañados y asimismo, que se atiendan de raíz las causas que propician este fenómeno”.
El presidente Obama ha pedido un apoyo suplementario de 2.000 millones de dólares para enfrentar la crisis de los niños detenidos, deportar a los menores y sellar la frontera al flujo migratorio.
