Los guardias fronterizos de Ucrania no permitieron la entrada en el país a más de 11.000 rusos, informó hoy el Servicio de Seguridad ucraniano.
“Para impedir la entrada a personas con ánimos radicales, en el marco de la operación “Frontera”, en particular, se vetó el ingreso de más de 11.000 ciudadanos de la federación de Rusia”, dijo una portavoz de la institución.
Según el Servicio de Seguridad ucraniano, más de cien rusos están implicados en actividades extremistas en el territorio de Ucrania.
Las restricciones de entrada en Ucrania afectan también a periodistas rusos. La representante para la libertad de prensa de la OSCE, Dunya Mijatovic, anunció la semana pasada que la organización conoce más de 20 infracciones de esa índole.
