Un tribunal especial en Islamabad oficialmente presentó cargos por alta traición al expresidente paquistaní, Pervez Musharraf, informó el periódico local Dawn.
Según la fiscalía, Musharraf, que fue presidente de 2001 a 2008, traicionó a su país en 2007 cuando proclamó el estado de excepción y ordenó detener a los jueces del Tribunal Supremo. Ahora, según las leyes paquistaníes, afronta la pena capital o la condena perpetua.
El propio general, de 70 años, que presenció la audiencia calificó las acusaciones de “infundadas” y se declaró inocente.
Sus abogados habían solicitado a los jueces no presentar cargos contra Musharraf y dejarle salir para Dubái donde se encuentra su madre.
Desde principios de enero, el expresidente se encuentra en un hospital militar por problemas cardíacos. Sin embargo, la justicia no le autorizó para ir a EEUU a fin de someterse a un tratamiento.
A principios de marzo el Ministerio del Interior paquistaní informó de que los talibán y Al Qaeda están organizando un atentado contra Musharraf dentro o frente a la sede del tribunal. En respuesta, el fiscal general, Akram Sheikh, comunicó que más de 2.000 personas velan por la seguridad del general de camino a la corte y la policía le protege en el hospital.
El Gobierno de Pakistán abrió una causa contra Musharraf en 2013.
Musharraf que abandonó Pakistán después de dimitir en 2008 regresó al país en marzo de 2013 para participar en las elecciones parlamentarias. En abril fue detenido y condenado a arresto domiciliario. Actualmente, figura en otras cuatro causas penales además de la de alta traición.
