Tres kamikazes que el 3 de agosto se dinamitaron cerca del consulado de India en Jelalabad, provincia de Nangarhar, al este de Afganistán, eran probablemente ciudadanos de Pakistán, informaron hoy fuentes del Gobierno indio citadas por el periódico Hindustan Times.
El atentado no causó víctimas entre ciudadanos de India. Murieron 12 afganos, incluidos ocho niños, que asistían a clases en una mezquita cercana al consulado.
Según Hindustan Times, los terroristas, procedentes de Pakistán, durante siete días permanecieron en la provincia de Kunar, limítrofe con Nangarhar. De allí se dirigieron al consulado indio. En sus accesos fueron parados, abrieron fuego contra los policías y accionaron explosivos.
Servicios secretos indios informaron que los tres fueron entrenados por unos miembros del grupo terrorista Lashkar e Taiba, autor del atentado de Bombay de 2008, que tienen bases en Pakistán.
“Ese ataque ha demostrado que la principal amenaza para la seguridad y la estabilidad de Afganistán parte del terrorismo y de la máquina terrorista que actúa en el exterior”, declaró el portavoz de la cancillería india Syed Akbaruddin.
