Las seis baterías de misiles antiaéreos Patriot, que Ankara solicitó a la OTAN para protegerse ante posibles ataques desde el territorio sirio, costaron a las arcas del Estado 15 millones de liras turcas (unos US$8,5 millones), informó el ministro de Defensa de Turquía, Ismet Yilmaz.
“Los Patriot nos han costado 15 millones de liras turcas. Pero incluso una vida humana es más importante que cualquier gasto”, afirmó el ministro, al tiempo de recordar que cinco ciudadanos turcos murieron en octubre pasado la localidad fronteriza de Akcakale, donde cayeron obuses lanzados desde Siria.
Yilmaz defendió el despliegue de Patriot “incluso si la probabilidad de estos sucesos es de uno a un millón”, y recordó que se trata de la primera vez que Turquía hace una petición de este tipo a la alianza, de la que es miembro desde 1952.
Por otro lado, el titular de Defensa turco informó que inspeccionó la víspera junto con sus homólogos alemán y holandesa, Thomas de Maiziere y Jeanine Hennis-Plasschaert, los sistemas Patriot instalados en las provincias sureñas de Adan y Kahramanmaras.
El pasado lunes la OTAN dio por concluido el despliegue de los Patriot en el territorio turco, solicitado por Ankara en noviembre pasado. Tres días antes de este anuncio, se hizo operativa en Gaziantep la última de las seis baterías antiaéreas enviadas por EEUU, Alemania y Países Bajos
Según la alianza atlántica, los sistemas Patriot podrán proteger de un potencial ataque desde Siria con proyectiles Scud a unos 3,5 millones de turcos, habitantes de las zonas fronterizas. Por su parte, Moscú considera que el despliegue podría empeorar la situación y que la OTAN se está implicando así en el conflicto sirio.
