Soldados del Ejército afgano decomisaron 3,25 toneladas de hachís, casi 40 minas y artefactos explosivos caseros y varios proyectiles de artillería en un operativo, realizado ayer en la provincia sureña de Kandahar, informaron fuentes militares, citadas hoy por la agencia Pajhwok.
Según las fuentes, durante la operación, llevada a cabo en la localidad de Nokak el pasado martes, fueron descubiertos 66 sacos con explosivos, narcóticos y bombas de fabricación casera. El propietario del depósito fue detenido.
En otro operativo especial, efectuado el mismo día en la provincia central de Uruzgán, los militares requisaron decenas de minas y miles de cartuchos, según Pajhwok.
El presidente de EEUU, Barack Obama, anunció a mediados del mes pasado la retirada de otros 34.000 militares estadounidenses de Afganistán a lo largo de este año, y prometió que la guerra en este país terminará para finales de 2014.
No obstante, el embajador estadounidense ante la OTAN, Ivo Daalder, dijo ayer que EEUU mantendrá un contingente militar en Afganistán más allá del año 2014 sin especificar el número de estos efectivos.
Las fuerzas locales, según él, ya garantizan la seguridad en los territorios donde vive un 90% de la población afgana. El traspaso de responsabilidades se completará en los próximos meses.
Las declaraciones de Daalder dan al traste con las conjeturas de que EEUU podría retirar a sus soldados de Afganistán a finales de 2014, junto con las principales fuerzas de la OTAN.
Mientras, la oposición armada representada por el movimiento talibán y el Partido Islámico de Afganistán manifestó en más de una ocasión su rechazo a negociar con el Gobierno de Kabul una reconciliación nacional, si continúa la “ocupación extranjera”.
