Los ataques preventivos contra las instalaciones nucleares de Irán sería la guerra más costosa Israel en los últimos 20 años, escribe hoy la prensa rusa citando fuentes israelíes.
Según cálculos hechos por la empresa Busines Data Israel (BDI), con sede en Tel Aviv, los ataques preventivos de la aviación de combate israelí contra instalaciones de Irán tendrán un costo de al menos 40.000 millones de dólares (167.000 millones de shekeles).
Actualmente en Israel el tema más difundido es la inminente guerra contra Irán. La prensa al citar fuentes del gobierno o del ministerio de Defensa, afirma que esos ataques pueden comenzar en los próximos meses.
A favor de atacar las instalaciones iraníes se manifestó incluso el presidente de Israel, Simon Peres, tradicionalmente considerado en el país como un político del grupo de las “palomas”, y tanto de los “halcones” en política exterior.
Peres propuso aplazar los ataques para después de las elecciones presidenciales en EEUU, el próximo mes de noviembre y actuar con la ayuda estadounidense.
La mayor parte de la opinión pública israelí piensa que no hay otra opción que atacar los objetivos nucleares iraníes porque según el gobierno falta poco tiempo para que esas instalaciones comiencen a fabricar armas nucleares.
Además, las autoridades iraníes son hostiles a Israel e incluso su presidente, Mahmud Ahmadineyad, afirmó en varias ocasiones que Israel debe ser borrado de la faz de la tierra y el pasado 17 de agosto, propuso construir un nuevo Oriente Medio, “sin sionistas ni estadounidenses”.
En caso de estallar una guerra contra Irán, la BDI calculó que las pérdidas directas ocasionadas a la infraestructura israelí y a la población serán seis veces superiores a las pérdidas ocasionadas en la guerra contra el Líbano, en 2006.
Aunque pueden ser cifras todavía mayores si se tiene en cuenta que la guerra contra Irán abrirá otros frentes de agresión contra el estado judío por parte de las guerrillas Hezbollah, que controlan el sur de Líbano.
Otra zona de tensión para Israel puede convertirse la Franja de Gaza donde la organización palestina Hamas, aliado de Irán, puede tomar represalias contra poblados israelíes en la frontera.
