Más de 60 personas murieron ayer, viernes, durante la dispersión de manifestaciones antigubernamentales en Siria, comunicaron anoche agencias que citan a defensores de derechos humanos.
Las protestas tuvieron lugar en las ciudades de Deraa, Homs, Ar-Rastan, Latakia y algunas localidades del extrarradio de Damasco. De acuerdo con activistas de derechos humanos, han sido identificados 62 muertos.
Anteriormente se informó de nueve muertos durante la dispersión de una manifestación antigubernamental en la ciudad de Homs y sus aledaños el viernes.
La agencia oficial siria SANA, que cita fuentes del Ministerio de Interior, comunicó a su vez que un "grupo de terroristas" mató a tres policías el viernes pasado. Otras 19 personas murieron cuando las fuerzas de seguridad dispararon contra un grupo de campesinos que se dirigía a la ciudad de Deraa, en el sur del país.
Las manifestaciones antigubernamentales en Siria estallaron a mediados de marzo después de que fuera arrestado en Deraa un grupo de escolares por escribir consignas antigubernamentales en las fachadas de edificios. Los vecinos locales se echaron a las calles para exigir su liberación.
Posteriormente las protestas se propagaron a otras regiones del país, particularmente a las ciudades de Homs, Hama, Latakia, Baniyas y las cercanías de Damasco.
El Gobierno sirio anunció hace poco un amplio programa de reformas y el levantamiento del estado de emergencia impuesto en 1963, cumpliendo así una de las principales exigencias de la oposición. No obstante, las protestas continúan.
Según la oposición siria, los choques entre los manifestantes y las fuerzas del orden ya han causado al menos 450 muertos.
