La publicación de los documentos secretos del Departamento de Estado de EEUU por el portal WikiLeaks suponen “un grave problema” para la diplomacia estadounidense, pero no afectarán los intereses nacionales de Washington y Moscú, informó hoy el director para Rusia y la región euroasiática del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, Michael McFall.
“La secretaria de Estado, Hillary Clinton, lleva a cabo una labor excepcional para minimizar el impacto del problema y la amenaza para la seguridad nacional de EEUU. Estamos trabajando en ese asunto, todo es bastante complicado e incómodo”, confesó McFall en unas declaraciones realizadas en el Centro Carnegie en Washington.
Al mismo tiempo, el funcionario estadounidense señaló que mantuvo “conversaciones molestas” con autoridades rusas descontentas con los hechos, pero está convencido de que lo ocurrido no perjudicará los intereses nacionales de ambos países.
“Rusia tiene sus intereses nacionales y mantiene un diálogo con EEUU sobre una serie de asuntos importantes” dijo McFall al tiempo de agregar que Moscú considera irracional cambios en esa política.
Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Philip Crowley, indicó que autoridades correspondientes del país continúan la investigación de las filtraciones de WikiLeaks y negó la implicación de EEUU en la detención del fundador de la página, Julian Assange.
“Nuestra investigación continúa su curso, mientras la detención de Julian Assange incumbe a Gran Bretaña y Suecia”, dijo Crowley mientras explicaba la negativa de EEUU de solicitar la extradición del australiano para juzgarlo en su territorio.
La Policía londinense detuvo el pasado martes el australiano Julian Assange, de 39 años a quien la Justicia sueca acusa de violación y acoso sexual.
